The frozen pond (El estanque helado)

http://vimeo.com/35155900

Este relato pertenece a LA HABITACIÓN DEL PIANO, (conversaciones con el piano checo), pequeña colección de eso mismo, relatos y cuentos, acompañados cada vez de su propia banda sonora, que podeis ver en el enlace de vimeo.
Que lo disfruteis, en este día de viento y frío fuera, y calor adentro.

E l   e st a n q u e   h e la d o

Patinaba todo los días, ingenua a los misterios que se escondían bajo ese suelo vivo, menos denso que el agua, creyéndome inmortal como él: Hielo.
Compuesto a partir de los fuertes enlaces de hidrógeno formados sólo a temperaturas bajas.
Bajo el agua, lo único que nos hace subsistir es nuestra propia temperatura y la fuerza con que el corazón se empeña en bombear sangre. Y todo en función, a su vez, de esa energía imprevisible, que se llama ganas de vivir. Dependiendo de su fuerza, de su intensidad y de su tenacidad, en las situaciones más difíciles e imposibles, naufragamos o sobrevivimos.
Ese día, sin saber cómo ni por qué, a pesar de mi precaución y habilidad, tropecé. La superficie invencible gritó, y a continuación una fisura a medida de mi silueta me absorbió.
Esta vez no tuve tiempo de luchar, cambié de estado en un simple parpadeo.
Al abrir los ojos una galería transparente, de compleja geometría diseñaba un nuevo espacio.
Aún pálida y casi líquida como el agua,sentía que era más el miedo lo que me impedía que el oxígeno, más fresco y puro que nunca.
Singular belleza aquí dentro, donde no existen las formas fijas, todo está en contínuo movimiento.
Ni los pensamientos se detienen, ni el corazón para de latir. Incluso late más fuerte. Bajo el hielo, el agua alcanza su máxima densidad, 3,8 grados centígrados. El instinto, más sabio que la cabeza, lucha por la supervivencia.
Aun cuando crees morir, cuando algo que te pertenecía se va de tí... aún en estos instantes, que parecen decidir tu destino... un relámpago de rabia, de ganas y de vida te impulsa a buscar la superficie.
Logré encontrar cierto placer en esa inmersión sin salvavidas.
Flashes y destellos de trozos de vida aparecían a gran velocidad. Los Porqués, sólo tenían una única respuesta.
Sí o NO.
No existía el tal vez.
Por qué quiero sobrevivir?...por qué???... por quién?.... N O !!!...por quienes?... el puzzle se ordenaba por sí sólo... todo lo que antes del accidente parecía fragmmentado, ahora era un tupido manto blanco, tejido con verdades... a las que vivía ajena, aún siendo parte de mí...aún conviviendo conmigo, aquí dentro, donde todo hace eco, donde todo habla, donde todo lo que tiene que estar, tiene habitación donde quedarse.
Sentí, que estaba segura conmigo, más segura de que lo que nunca imaginé...
Estaba VIVA.
El frío de aquél estanque y tu capa de hielo, me devolvieron a la vida.
Siempre recordaré ese día.