domingo, 12 de febrero de 2012

gritan por tí

(vídeo adjunto,  t e x tu r e s, realizado junto a Erissoma,  lo encontrais en el link a continuación... sugiero escuchar y leer a la vez... espero que os guste!!)

https://vimeo.com/36636107

g r i t a n   p o r   t í

3:00 de la madrugada.
No puedo dormir.
Siento inquietud.
Mi cabeza no para de describir situaciones límites.
Sentencias sin vuelta atrás.
Fronteras inquebrantables.
El corazón se acelera.
El pulso es un tranvía cuesta abajo.
Estrellarme o saltar.


P U N T O   M U E R T O

Dónde terminó la pesadilla empezó la interrogación.
Una noche como dos huracanes Katrina juntos.
¿qué rumia en la cabeza
para ser inundada por miedos imaginarios??....
Nacemos con los miedos o aparecen según crecemos...??

Cuando era pequeña la oscuridad era un mundo de posibilidades...
...pensaba que el cielo de día era una sábana enorme
con cuatro esquinas que se hundían en la tierra.
En el campo a pleno sol miraba hacia arriba y me asustaba...
me veía tan pequeña bajo esa inmensa tela que no tenía fín.
Sin embargo, por la noche yo veía el cielo con sus estrellas...
y ése era para mí el cielo de verdad, no me daba miedo.
Mi hermano y yo a partir de los 7 años, ya éramos
criaturas nocturnas... viájabamos juntos a lo más profundo de la noche.
Escúchabamos programas que avistaban ovnis,
y nos escápabamos a la terraza con prismáticos y mapamundi.
Marcábamos las trayectorias de los avistamientos.
Desde El Golfo de Méjico hasta Andalucía.
Tiempo récord 45 minutos... posibilidad de avistar
el ovni atravesando la Península... tamaño y color
eran detalles muy importantes.
Se nos salían los ojos de las órbitas.
Veíamos cosas brillar en el fundido negro...
discutíamos, nos peleábamos por los prismáticos.
La adrenalina nos comía...
un cóctel de miedo a...
nos van a descubrir...
quién???
los extraterrestres?
papá?... mamá?
.......?
En realidad me pasé gran parte de la infancia
esperando bajo el cielo estrellado, una señal, un algo...
que me hiciera temblar y volar.

En uno de esos infinitos viajes en tienda de campaña
con la familia... furtivos en el medio de la nada...
rodeados de animalitos del bosque y otras fieras...
salir cuando todos dormían era desafiar la naturaleza.
Pero qué había más interesante para mí... que imaginar??

Dibujé  en tantas ocasiones ese primer encuentro interestelar,
como en un storyboard... detalle a detalle.
El encuentro Tan TEmido y Tan DEseado...
...sóla...noche... luz que se acerca... se detiene una nave...
me acerco... y aquí comienza la fantasía en un platillo volante imaginario, maravilloso... sin puertas de entrada...sólo un tubo de luz verde que me absorbe tan pronto estoy bajo su foco...
cierro los ojos y me abandono.
Lo siguiente es una estación donde todo es de color rojo.
todo se refleja como en un salón de espejos sin paredes.
Hay muchos botones y muchas máquinas que hablan,
te señalizan el camino iluminándolo como en una autopista de noche,
hay muchos ojos y ninguna ventana... te sientes observada, te sientes acompañada...
Pasillos infinitos, olor a metal...
el sonido propio del lugar es vacío en movimiento...
... llego a un espacio en el que hay muchos niños y niñas como yo,
de razas diferentes... sonrientes!
No había lápices ni cuadernos, la mente desatada hablaba simultáneamente...
No había razones para esconderse, ni razones para mentir.
Éramos transparentes.
No existían las barreras para el pensamiento ni el sentimiento.
El juego era vivir, crecer, aprender, compartir.

(Por aquél entonces todavía no había leído "Un mundo feliz",
pero sí El Principito...)

El viaje interespacial tuvo unas cuantas versiones...
sin haber dado todavía con la definitiva.
Según íba creciendo, me íba dando cuenta que...
hacerse mayor a veces significa prestarle demasiada
importancia a lo que pasa aquí, en un radio no más grande
que el de nuestro ombligo y el de nuestro vecino.
Se nos olvida todo ese mundo mágico lleno de estrellas...
nuestro único satélite, LA LUNA, ingeniera de mareas...
cómplice de nuestros deseos más ocultos y nuestros sueños.
Es la única que de verdad nos alumbra cada noche, fiel a su cita.
En el desierto es costumbre mirar al cielo cuando oscurece...
EN SILENCIO, comparten la belleza del Universo y su Misterio.

En la ciudad nos dicen que no se ven las estrellas.
No es verdad.
Claro que se ven, sólo tenemos que prestarles atención....
Y con qué fín???...
... cuando era pequeña,
muchas preguntas sin respuesta tenían sentido, porque simplemente ERAN.
Hoy las preguntas sin respuesta nos inquietan... por eso en noches de insomnio y turbulencias... me vuelvo pequeña otra vez... salgo a la terraza... miro a la luna... a sus amigas las estrellas... y pienso... y siento... lo que pensaba y sentía entonces...

Gritan por tí, es la frase que hoy me hízo volver a esa nave, a esa imaginación sin filtros.
Gritan por tí, es LA amiga que me lanzó una llave encantada para abrir ventanas en el cielo.
Gritan por tí, son ell@s....los  que desgarran sus cuerdas en un escenario, exorcizándose por nosotros.
Gritan por tí, son las estrellas que parpadean y nos hacen guiños para recordarnos el infinito.
Gritan por tí....somos todos.
GRITAN POR TÍ...  y por tí también.



(gracias amiga por compartir este invierno)